Una administración que quiera estar a la altura de los tiempos y que enfrente el futuro debe estar permanentemente en obras, transformándose, haciendo reformas pequeñas y obras de gran calado, según sea la necesidad en cada momento. Y para ello se necesitan obreros, capataces, aparejadores, arquitectos, promotores y empresas de servicios que ayuden a terminar las obras y a operar los nuevos servicios con éxito.
En el IX CNIS hemos reconocido a muchos de estos artífices de las administraciones del futuro y así hemos contado con un centenar largo de ponentes presentando sus proyectos. Muy especialmente hemos atendido a aquellos que en su nivel de responsabilidad proponen, promueven o ejecutan las obras de mejora y adaptación normativa e introducen las tecnologías adecuadas para dar más y mejores servicios. Hemos escuchado a grandes diseñadores, a la cabeza de las tendencias, a los que aprenden de estos y los que aplican a sus propias obras su toque de talento e iniciativa y también a los que vienen a formarse para saber como construir y operar a partir de mañana.
Una administración que se precie debe considerarse en este siglo XXI permanentemente «abierta por obras«, la dinámica de los tiempos así lo exige. Y en CNIS hemos estado mano a mano todos implicados en este proceso, ofreciendo soluciones, materiales, planos, diseños, presupuestos y todo lo necesarios para que la administración avance más deprisa cumpliendo sus objetivos de servicio y aportando valor.
Agradecemos especialmente la labor de los que están desde hace años aportando su apoyo como el Ministerio de Política Territorial y Función Pública habilitando infraestructuras que permiten planificar y ejecutar, a la Federación Española de Municipios y Provincias que reúne expertos para proponer guías de uso y plantea comisiones de trabajo para el cambio, al CCN que vigila la seguridad de estas obras, a los Institutos y Escuelas de Administración Pública, cada día más implicados en formar a los responsables de esta construcción y a sus equipos, a las universidades, y fundaciones que piensan y crean soluciones y a las empresas que proveen de equipos y materiales, diseño y técnica.
Muy especialmente hemos disfrutado de la presencia de nuestros Innovador@s Públicos, de su entusiasmo y compromiso, siempre con el casco calado y dispuestos a tomar pico y pala, arena y hormigón, ladrillos y planos. Mujeres y hombres sin miedo al cambio, a las reformas, a los riesgos de la innovación.
Gracias a todos los que nos habéis acompañado en esta IX edición y también a aquellos que con esa misma ilusión y vocación de construcción de una administración mejor van a poder ver a través del portal de nuestro Congreso todos los vídeos y ponencias para poner, si no lo han puesto ya, desde hoy mismo a sus administraciones en situación de «abierto por obras«.